Suplas es una marca de riego agrícola desarrollada con la experiencia en ingeniería, producción e I+D de larga trayectoria de Akplas, que opera en el sector desde 1989.
La siembra continua en la misma parcela aumenta la presión de enfermedades y reduce la productividad. Las leguminosas y los cereales, especialmente los grupos de cereal de invierno, son opciones ideales para una correcta rotación.
La producción de patata usa tubérculos como material de semilla. Los tubérculos ideales deben tener 6 cm de diámetro y un peso aproximado de 50 gramos. La variedad de semilla debe seleccionarse según el objetivo de producción. Se deben preferir semillas certificadas que cumplan los estándares. Durante la siembra, los ojos deben estar activados con brotes verdes de alrededor de 1 cm de longitud.
La distancia entre hileras es de 70–75 cm, y la distancia entre tubérculos en la línea varía entre 20–40 cm. La profundidad de siembra es 2 cm en el método superficial y 5 cm en el método profundo. En la siembra superficial, se debe cubrir el tubérculo con al menos 15 cm de suelo en el aporque, y 10 cm en la siembra profunda. Momento del aporque:
La producción de patata exige cuidados regulares. Antes de la emergencia, el paso de rastra “sin dientes salientes” ayuda a romper costra superficial y eliminar malas hierbas recién surgidas.
Cuando la planta tiene 3–4 hojas, se realiza la primera escarda sin dañar el suelo superficial. Se airea el suelo, se limpian malas hierbas y se conserva la humedad. Puede repetirse 3–4 veces cada 20 días si es necesario.
La patata responde muy bien al estiércol orgánico. Aplicar 1.5–2 t/da o 2.5–3 t/da en suelos pobres aumenta notablemente el rendimiento. Superar estas dosis afecta negativamente sabor y equilibrio de almidón.
Lo ideal es definir la fertilización con análisis de suelo previo. Sin análisis: 14–16 kg N, 8–10 kg P, 8–10 kg K por decárea en producción con riego.
Fósforo y potasio + 50% de nitrógeno (como sulfato amónico o urea) se aplican homogéneos sobre la línea y se cubren. Si se usa sembradora combinada: P, K + la mitad de N en la misma banda; el 50% N restante antes del primer riego/aporte de suelo.
El momento de cosecha se reconoce cuando hojas/tallos se secan, tubérculo toma su tamaño final y piel se endurece. La piel no se desprende con la uña; el corte es denso y mate.
La cosecha debe ser cuidadosa: no dañar el tubérculo ni dejar producto bajo suelo. El suelo debe estar en tempero ideal, sin exceso de agua ni sequedad.
Métodos de cosecha:
También con cosechadoras de 1 o 2 hileras; arranque + recolección con máquina.
Si húmeda, secado a sombra. Se descartan enfermas, podridas, dañadas. Luego se calibra: grande/medio/pequeño y se envasan en sacos de malla.
El mal almacenamiento genera grandes pérdidas por su alto contenido de agua: podredumbre, arrugas, brotación, caída de calidad.
Las mejores condiciones son: tubérculos maduros, limpios, sin daño, almacenados en instalaciones especializadas: 3–4oC, 85–90% HR, ventilación activa que controle CO₂, calor, humedad respiratoria y aporte O₂. Altura de pila: 3–4 m para consumo; máximo 1 m para semilla.
REFERENCIAS
Ahmet ERAKMAN Ingeniero Agrónomo – SAMSUN
